Los 1.200 millones de exportaciones agroalimentarias extremeñas exigen acelerar la mejora de las conexiones a puerto
La Estrategia Logística de Extremadura prevé disponer de 407 hectáreas de suelo bruto para actividades logísticas
Las exportaciones agroalimentarias de la Comunidad de Extremadura suman cada campaña más de 1.200 millones de euros en valor, desde el tomate en bidones y lata que sale de las industrias de las Vegas del Guadiana a las planchas de corcho de San Vicente de Alcántara, el tabaco en rama desde Talayuela, el vino a granel y embotellado desde Tierra de Barros hacia medio mundo, las ciruelas y nectarinas de las grandes centrales hortofrutícolas o el cordero amparado rumbo a Italia o a países árabes…
Decenas de productos en los que las industrias, empresas y cooperativas extremeñas han ganado protagonismo con el paso de los años por su alta calidad y precio ajustado pero que deben luchar con el hándicap de una logística más compleja y cara que sus competidores de otras zonas de España más cercanas a puerto o de otros países más cercanos a los mercados de consumo de Centroeuropa. Solo la industria de conservas vegetales mueve cada año más de 675 millones de euros en ventas al exterior y miles de camiones hacia puerto y destino directo por carretera.
Hay que tener en cuenta que de los 2.155 millones de euros que exportó la región en el año 2020, según datos del Boletín de Comercio Exterior de la Junta de Extremadura, unos 1.800 millones tuvieron como destino países de la Unión Europea: con Portugal con 593 millones de euros, Francia con 361 millones, Alemania con 244 millones, Países Bajos con 186 millones, Italia con 120 millones y Reino Unido con 97 como principales compradores. Aunque ya se exportan mercancías por valor de más de 104 millones de euros al continente africano, 60 millones a Asia, 35 millones a Estados Unidos, 13 millones a China o 22 millones a Japón.
Mercados de ultramar estos últimos que exigen el uso de los puertos españoles más cercanos y los que más conexiones internacionales presentan como los de Huelva, Bahía de Algeciras o Valencia, así como los portugueses. Y que demandan mejoras en la red de carreteras tanto en la vertiente atlántica del comercio como en la Mediterránea, así como modernos enlaces y conexiones vía ferrocarril, con una intermodalidad más eficaz y ajustada en precios.
Ferrocarril y carretera
La denominada Estrategia Logística de Extremadura presentada por la Junta de Extremadura con los agentes sociales establece una serie de objetivos con el horizonte temporal del 2030, 2040 y 2050, que ponen el acento en los grandes hubs logísticos de la región –Badajoz, Mérida, Navalmoral de la Mata, Cáceres,…- y también en la integración con el Eje Atlántico y especialmente en las relaciones comerciales con Portugal a través de la futura Alta Velocidad mixta de mercancías y pasajeros.
El objetivo a pocos años vista es poner a disposición de las empresas e industrias de la región y de fuera en torno a 407 hectáreas de suelo logístico bien conectado vía ferrocarril y carretera. La llegada de la multinacional norteamericana Amazon, con uno de sus almacenes logísticos inteligentes, a la Plataforma del Suroeste Europeo de Badajoz, puede ser un punto de partida para el despegar logístico de la región.
Uno de los grandes objetivos logísticos de la región en los próximos años pasa por la ejecución de las infraestructuras planificadas tanto terrestres como ferroviarias para mejorar la conectividad de Extremadura con Castilla La Mancha, Andalucía y Portugal, así como impulsar el desarrollo de las nuevas Áreas Logísticas previstas en las zonas de Zafra, Vegas Altas y el norte de Cáceres (Plasencia y Coria).
El desarrollo de la Estrategia Logística en su escenario definitivo supondría la disponibilidad de 407 hectáreas de suelo bruto cualificados para actividades logísticas, con 203,5 hectáreas de suelos netos y 1,42 millones de m2 de techo edificable. Se precisará una inversión total de 670 millones de euros para la ejecución de las áreas logísticas propuestas, de los cuales 102 millones de euros se dedicarán a la urbanización e infraestructuras y 570 millones de euros para las edificaciones.