La DO Cereza del Jerte certifica sus primeras Picotas de las que se venderán 7,5 millones de kilos
El Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida Cereza del Jerte ha comenzado a certificar las primeras Picotas de las cuatro variedades certificadas: Pico Limón Negro, Pico Negro, Pico Colorado y Ambrunés, esta última, la más apreciada por ser la que más tiempo madura en el árbol al sol, y por tanto es la más dulce.
El presidente del Consejo Regulador, Ignacio Montero, comentó que “la calidad del producto se presenta buena aunque la campaña este año es ligeramente inferior a la pasada con una previsión de 7 millones y medio de kilos de Picota certificada”. “Esperamos que la climatología nos acompañe para poder recoger toda la cosecha que se terminará a finales de julio”, añade Montero.
Las Picotas del Jerte son un producto exclusivo que se distingue por su sabor y dulzura. Son las únicas que se desprenden del árbol sin rabito, pero hay más características que las diferencian del resto: su textura carnosa y más crujiente, su tamaño de un calibre de menor tamaño – comprende desde los 22 a los 26 milímetros- y su sabor más dulce y su color. Su cultivo natural y su recogida y tratamiento tradicionales multiplican sus propiedades y permiten que lleguen a los mercados en el momento óptimo para el consumo.
Este producto cada vez está más demandado tanto en el mercado nacional como internacional, sobre todo en Alemania y en Reino Unido. El 70 por ciento de la producción de Picotas del Jerte se exporta, mercados donde sus precios venta al público son muy superiores a los del mercado español. Además, la competencia en España de cerezas de menor precio como las de Aragón complica más su comercialización y márgenes comerciales.
Cada vez es mayor el número de empresas privadas que comercializa las cerezas y picotas con DO del Jerte, aunque la Agrupación de Cooperativas sigue siendo su principal referente.