BBVA Research prevé que el PIB per cápita de Extremadura aumente más que el de España en 2025 y 2026
Según el informe ‘Situación Extremadura 2025’ de BBVA Research, presentado por Miguel Cardoso, economista jefe de BBVA Research para España, y por Asunción Álvarez Puerta, directora de la regional sur de BBVA en España, el crecimiento de la economía regional seguirá siendo sólido en 2025; sin embargo se prevé una desaceleración debido a la elevada incertidumbre de política económica y a la expectativa del impacto del cambio en las políticas arancelarias de EE.UU. en España y en los países europeos. Con todo, a finales de 2026 el PIB per cápita podría situarse 6,4 puntos por encima de los niveles prepandemia, mostrando un diferencial positivo con respecto al conjunto nacional (4,5 puntos).
Los datos del tercer trimestre de 2025 apuntan a que la afiliación en Extremadura se aceleró con respecto al trimestre anterior, lo que contrasta con el perfil de desaceleración de la mayoría de comunidades. Aún así, el avance resulta modesto y se sitúa en la cola. Las áreas urbanas muestran un crecimiento sólido, mientras que destaca la caída en las áreas rurales. Al igual que en años anteriores, el sector público, las actividades profesionales y las manufacturas volvieron a empujar el avance de la afiliación en lo que va de 2025. Por su parte, la agricultura y la construcción muestran un débil desempeño, lo que limita el crecimiento del mercado laboral en la región.
En 2024, la Junta de Extremadura aceleró el gasto en consumo, elevando su peso sobre el PIB regional en torno al 16,2 %, el nivel más alto del conjunto autonómico y muy por encima de la media (10,8 %). Este aumento se explica fundamentalmente por la remuneración de los asalariados, impulsada tanto por la estabilización como por la ampliación de la plantilla pública. Aunque en el primer trimestre de 2025 se observa cierta contención del gasto, la actualización de los salarios en el sector público, junto con los conciertos sanitarios y sociales, continuará ejerciendo presión al alza sobre este componente del gasto regional.
Según BBVA Research, el aumento de los aranceles y de la incertidumbre de política global afectarán a los flujos comerciales y a la inversión, lo que impacta en la producción de Extremadura. A ello se añade que la apreciación del euro supondrá un deterioro de la competitividad, con impactos potencialmente heterogéneos, y riesgo potencialmente menor para Extremadura.
Junto a estos factores externos, a nivel interno destaca el elevado nivel de ahorro de las familias, que continúa en cotas relativamente altas. Este comportamiento es especialmente pronunciado en las franjas de edad más elevadas y también entre los jóvenes. Las comunidades del norte y Extremadura serían los territorios donde más se está acumulando este ahorro, por tener una población más envejecida.
