Melquiades González (Nueces Íberas): “La comercialización directa de nueces de calidad y con origen es la única salida”
Entrevista con
Melquiades González
Director de Nueces Íberas
El cultivo del nogal y la producción de nuez se han ido extendiendo en los últimos años tanto en las Vegas del Guadiana como en algunas comarcas del centro y norte de Cáceres. Aunque son todavía pocas las empresas que han optado por la comercialización directa del producto, también envasado, y con nuevas presentaciones y productos con base en la nuez.
Una de las más innovadoras es Nueces Íberas, ubicada en Puebla de la Calzada (Badajoz). Con plantaciones propias, producción y venta de nueces con cáscara y peladas, secadero de nuez con servicio de calibrado, secado y envasado, venta de planta certificada… La empresa ha dado un paso más en la comercialización de productos con base en la nuez, entre ellos el turrón con nuez y miel, la crema de queso con nuez y miel, o la crema de queso con higo y almendra.
¿Cómo surgió el proyecto de Nueces íberas y en qué momento se encuentra?
Mi padre fue uno de los pioneros en la plantación de nogal en Extremadura en el año 2005. Hemos aprovechado toda su experiencia en campo. Yo estudié Ingenieria Agrónoma y decidimos lanzar el proyecto de Nueces íberas, enfocado la producción de nuez de calidad. Nos interesa más que la cantidad. Comercializamos nuez con cáscara y nuez pelada, tanto en convencional como en ecológico, y también nuez chocolateada con chocolate belga. Y últimamente hemos apostado por la elaboración de productos de valor añadido con base en la nuez: turrón de nuez con miel, crema de queso con nuez y miel, y crema de queso con higo y almendra. El primero de ellos lo presentamos en el Salón Gourmets de Madrid.
¿La innovación en un sector como el de los frutos secos tiene todavía mucho recorrido?
Para nosotros la innovación resulta clave en nuestra actividad. Nos ha pasado por ejemplo con el turrón con nuez y miel donde se han superado todas nuestras expectativas iniciales en cuando a demanda. Ha gustado mucho el producto. No se trata de sacar por sacar productos, sino de pensarlos bien y añadirle a la nuez otros complementos que la realcen aún más. Y productos que sean fáciles de comer, para diferentes horas del día.
¿Contar con plantaciones propias es una de las señas de identidad del proyecto de Nueces íberas?
Contamos con dos plantaciones propias de nogal, un en Puebla de la Calzada y otra en Montijo. Tanto en convencional como en ecológico. La nuez nacional frente a la que suele comercializarse importada en España tiene más sabor y calidad. El cliente cada vez valora más esta cercanía, su origen. Muchas veces ni te preguntan por el precio. Repiten la compra porque les gusta el producto. En Montijo contamos con una tienda física de venta y también somos muy activos en mercados de productores. Extremadura, Madrid, Córdoba… son nuestros mercados naturales más activos hasta ahora. Explicar directamente al consumidor nuestro proyecto familiar es muy importante. La venta on line, que es complementaria, va creciendo, y puede suponer entre el 20/25% de las ventas ya.
¿Qué consejos le darías al agricultor que piense entrar en el cultivo del nogal?
Es un cultivo con el que hay que tener paciencia. Es especial. Se ha plantado mucho nogal y va creciendo en Extremadura. El problema viene cuando los mercados se saturan y comienzan los dientes de sierra. Es un producto que depende mucho del mercado exterior. De la nuez que llega de California, Chile o China por ejemplo. Son mercados que van a volumen y no podemos controlarlo. La única salida es ofrecer una nuez diferente, con origen, de calidad y comercializarla con otros productos de gran calidad que existen en Extremadura. Venderlo tú directamente sin intermediarios.
