Los productores apuestan por crear una IGP del ibérico para proteger más al producto
El sector del ibérico respira aliviado en los últimos meses ante la mejora de las cotizaciones y también de la salida comercial del producto. La crisis empresarial que afectó a numerosas empresas, algunas muy importantes de la región como Resti, El Arroyano, Mafresa o Acosierra, ha redimensionado las bodegas y aclarado el sector. Y sobre todo la Norma del Ibérico.
Según UPA-UCE, “el porcino ibérico ha mejorado su situación con respecto a hace unos años tras la crisis sectorial que padeció. Las razones de esta mejora se deben fundamentalmente a la implantación de la Norma de Calidad del Ibérico, la buena montanera de este año y a unos precios adecuados a la calidad del producto extremeño”.
Aunque sigue habiendo problemas a pie de dehesa. Ignacio Huertas, secretario general de UPA-UCE Extremadura, señala el problema que supone tener que inscribir a los machos DUROC en los libros genealógicos.
Con respecto a ITACA, el sistema para ayudar al cumplimiento de la Norma y aportar más transparencia al funcionamiento del sector, desde UPA-UCE alertan de que se debe mejorar la información de la Industria en el sistema y reforzar los controles en los puntos de venta, que desde la organización profesional agraria califican de “puntos negros”, para garantizar a productores y consumidores que no se produzcan problemas de fraude.
La montanera de este año ha sido superior a la de 2015 con unos 670.000 animales en toda España, un 25% más que el año pasado.