Gonzalo Palomo (Extremadura Sana): “Acumulamos pérdida de posiciones en importancia del sector agroecológico en Extremadura respecto a otras regiones”
Entrevista con
Gonzalo Palomo
Coordinador General de Extremadura Sana
Gonzalo Palomo Guijarro es el coordinador general de Extremadura Sana y representante en el Comité de Agricultura Ecológica de Extremadura (CAEX)
¿Qué es la Asociación Extremadura Sana y qué objetivos tiene?
Somos un grupo de personas que desde la producción, el consumo y el asesoramiento trabajamos con el compromiso de lograr que la Agroecología sea una realidad en el medio rural extremeño y se plantee como alternativa, para que su desarrollo socioeconómico sea sostenible e inclusivo. Somos representantes ante la Junta de Extremadura del sector de la agricultura ecológica, organizamos regularmente foros y servimos desde hace cerca de veinte años como soporte para la conexión de los diferentes agentes del sector en Extremadura y hacia fuera.
¿Cómo valoras la situación actual de la agricultura ecológica y la agroecología en España?
España ha retomado su primer lugar en superficie en Europa y lleva años entre los 10 primeros del Mundo hace décadas. Aún queda trabajo por hacer en el consumo y también la cadena de valor. Que sea posible no solo producir sino también transformar y comercializar eco aquí a ser posible lo más local posible. Extremadura Sana surge en un contexto de explosión del modelo ecológico a nivel campo.
Según datos del Ministerio de Agricultura, en Extremadura estaban registradas en 2007 un total de 3.694 operadores ecológicos que abarcaban 65.673 ha en producción. Hasta el año 2009 la superficie certificada se incrementó un 75% y el número total de elaboradores un 186%. Entre dicho año y 2022 (con dos planes estratégicos mediante) la superficie tan sólo se había incrementado hasta las 90.000 ha y los operadores habían bajado hasta 3.258.
Sin embargo, en 2023 hay un repunte de más de un 50% alcanzando las 142.000 ha. A pesar del cual acumulamos pérdida de posiciones en importancia del sector en la Región respecto a otras comunidades autónomas. Y de hecho este último repunte lo achacamos a la convocatoria de ayudas agroambientales tanto en cuanto la mayor parte ha sido superficie de olivar y pastos que son quizás los sectores que menos cambios tienen que realizar para cumplir con la normativa de certificación.
En Extremadura aún queda más recorrido en la cadena de valor puesto que ya venimos de carencias en cuanto al tejido agroalimentario en general. Por ejemplo, en productos de origen animal apenas hay cinco queserías, dos mataderos certificados y cuatro fábricas de piensos (todas en Badajoz).
La Generalitat de Catalunya es la primera administración de España que promueve la compra de productos de Km0 o locales en los concursos públicos de comedores, residencias, hospitales públicos… ¿sería importante y factible hacerlo aquí?
La contratación pública eco es un mandato de la Comisión Europea que poco a poco va calando en los estados miembros. Tristemente España vamos con retraso (quitando honradas excepciones) a pesar de ser los primeros en producción. En Extremadura hay proyectos piloto que han demostrado la viabilidad del aprovisionamiento eco en comedores escolares, socios nuestros son proveedores ya de cocinas colectivas y sin duda es una gran herramienta para facilitar la consolidación de los productores y elaboradores de la región y por otro lado un derecho de nuestros escolares, mayores y población usuaria de comedores sociales de una alimentación de calidad diferenciada.
¿Cómo está la situación de los mercados locales y grupos de consumo de productos ecológicos en Extremadura?
De los grupos de consumo que surgieron hace 20 años en la Región y florecieron por toda la geografía con participación de unos 500 hogares (trabajos de Sara Velázquez y Luisa Cardenete) hemos dado paso a un contexto más heterogéneo de iniciativas de consumo responsable como cooperativas, huertas colectivas, rebaños comunitarios… Además contamos con mercados de productores puntuales y algunos ya consolidados como el BioMercado de Cáceres que tras un par de años primero por iniciativa del ayuntamiento y luego de una cooperativa integral, ACTYVA, ha sido regulado formando parte de la ordenanza de venta ambulante de la ciudad.
