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Cómo mejorar el aprovechamiento ganadero en las más de 10.000 hectáreas de plantas fotovoltaicas en Extremadura

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Ovejas en planta fotovoltaica de Iberdrola en Campo Arañuelo

CICYTEX estudia las ventajas del pastoreo regenerativo y las mejoras de las cubiertas vegetales en instalaciones fotovoltaicas

La ganadería extensiva es una de las señas de identidad del campo extremeño, al igual que las de nuestras regiones vecinas de Portugal como el Alentejo. Tanto para vacuno como para ovino, caprino y cerdo ibérico sobre todo. El III Congreso Hispano-Luso de ganadería extensiva y desarrollo rural celebrado en Cáceres a primeros de diciembre del año pasado contó con las aportaciones de destacados expertos y profesionales del sector en numerosas áreas que tienen que ver con la ganadería, desde su manejo en campo y alimentación hasta la sanidad. Y con nuevas perspectivas que tienen que ver con otros usos que se están implantando en miles de hectáreas de territorio extremeño, como son los proyectos fotovoltaicos, para analizar las mejores vías de convivencia con el aprovechamiento ganadero de las fincas.

Hay que tener en cuenta que Extremadura lidera el mapa de la energía fotovoltaica en España, con más de 4.000 MW fotovoltaicos instalados, el 25% del total nacional por delante de otras regiones como Andalucía o Castilla-La Mancha. En los últimos años se han llegado a instalar más de 1.300 nuevos MW al año de fotovoltaica. Especialmente los grandes proyectos de más de 200 MW de potencia necesitan extensiones muy destacadas de fincas, por encima de las 400 ó 500 hectáreas. En muchos casos, esas fincas estaban destinadas a aprovechamiento ganadero, sobre todo de ovino y vacuno.

Modelos agrovoltaicos
Una de las ponencias presentadas al pasado Congreso Hispano-Luso de ganadería extensiva trataba sobre el pastoreo regenerativo y las mejores de cubiertas vegetales en las plantas fotovoltaicas de Extremadura, presentado por Irene Balas y Valentín Maya, del Centro de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de Extremadura (CICYTEX). Según sus autores, “el impulso recibido por las energías renovables en los últimos años ha supuesto un importante incremento en la superficie ocupada por las instalaciones fotovoltaicas en Extremadura, superando actualmente las 10.000 hectáreas. Este desarrollo podría llegar a competir con aprovechamientos agrarios tradicionales. Para evitar esta competencia se está trabajando el desarrollo de modelos agrovoltaicos sostenibles que permitan crear un sistema mixto de aprovechamiento fotovoltaico y agrario en una misma superficie”.

Una de las claves de estas investigaciones reside en las cubiertas vegetales que garanticen la alimentación y suficiente carga ganadera, pensada especialmente para ganado ovino. “Desde CICYTEX -aseguran sus autores- se propone la mejora de las cubiertas vegetales existentes en la zona ocupada por la instalación eléctrica y su aprovechamiento mediante manejo regenerativo con ganado ovino, con el objetivo de aplicar una correcta gestión de la vegetación y de los suelos, a la vez que se potencia una actividad económica. El objetivo del proyecto es analizar el impacto que tendrá sobre las condiciones ambientales (propiedades del suelo y vegetación) el uso del modelo propuesto frente al modelo tradicional de aprovechamiento realizado habitualmente en las plantas fotovoltaicas.

Sobre el terreno
Para analizar las posibilidades y ventajas de este modelo, se eligió una planta fotovoltaica de 37 has, y se seleccionaron 6 hectáreas de terreno sobre las que se implementó el modelo propuesto. Se sembró como cubierta vegetal una mezcla biodiversa de leguminosas pratenses adaptada al contexto edafoclimático de la planta. En esta superficie se aplicó pastoreo regenerativo con ganado ovino, realizado bajo unos criterios adecuados sobre el uso de cargas ganaderas, duración y momentos de aprovechamiento. La superficie de la planta fotovoltaica en la que no se implantó la cubierta, se aprovechó también para ganado ovino pero en este caso sin ningún criterio de gestión, como testigo.

Al inicio del proyecto en 2021, se analizaron las propiedades físico-químicas del suelo de la planta fotovoltaica además del estado de la vegetación herbácea (especies, producción y cobertura), estas analíticas volverán a repetirse en primavera de 2023 para estudiar la evolución de los parámetros asociados a los dos modelos de gestión.